Más del 98 por ciento de los niños nacidos vivos en Guantánamo y Baracoa se sometieron a la prueba de emisiones otoacústicas para la detección precoz de pérdidas auditivas, lo que cumple la pretensión nacional de cubrir, al menos, un alcance de la pesquisa del 90 por ciento.

El doctor Eleazar Bueno González, especialista de primer y segundo grados en Otorrinolaringología y responsable del Programa de Audiología en la provincia, explicó que se garantiza lo necesario para las pruebas, que la realizan licenciados en logofonoaudiología en los servicios de neonatología de los hospitales Dr Agostinho Neto, de la capital provincial y Octavio de la Concepción y la Pedraja, de la Ciudad Primada.

Los procederes, abundó, se ejecutan con un equipamiento de fácil manipulación que emite un sonido y, por medio de un dispositivo que se coloca en el oído externo del niño, es también capaz de recibir las emisiones de la cóclea cuando funciona de manera normal.

Cuando estas emisiones pasan y se registran, se considera que el neonato no tiene dificultades auditivas, mientras, si no ocurre así, se presume que existen problemas para escuchar de diferentes índole, y se orienta una segunda prueba, al siguiente mes.

Si persiste el resultado, se realizan pruebas de potenciales evocados auditivos de tallo cerebral y de estado estable que, de ser positivas, confirman el trastorno en el bebé, quien pasa a manos de un equipo multidisciplinario para su rehabilitación inmediata.

La rehabilitación implica la colocación de prótesis auditivas, al sexto mes de vida, o la opción de un implante coclear, la estimulación del lenguaje, el apoyo psicológico y la atención a todos los problemas neurológicos y de otra naturaleza que pueden estar relacionados con estas enfermedades.

En el caso de los neonatos con factores de alto riesgo de padecer dificultades auditivas, como la prematuridad, el bajo peso al nacer, determinadas enfermedades de la madre durante la preñez, y antecedentes familiares, siempre se someten a los estudios de potencial evocado, incluso si pasan la primera prueba.

El pesquisaje universal auditivo en recién nacidos, que aquí se realiza desde el 2018, ha posibilitado que los niños accedan a la rehabilitación temprana, con apoyo familiar, así como desarrollar su lenguaje completo a la edad fisiológica de los tres años, y favorecer el pensamiento y el aprendizaje.

Fuente: Periódico Digital Venceremos