Según la Agencia de Medicamentos y la Cooperativa Científica Europea se ha demostrado que la salvia es beneficiosa para diversos tratamientos, entre ellos, la inflamación de la boca y la garganta, como la gingivitis y la faringitis; por sus propiedades antibióticas combate las infecciones, y contiene estrógeno, por lo que alivia los síntomas del climaterio.
También se habla de su utilidad para tratar heridas y úlceras, por su poder de cicatrización; para la acidez estomacal y otros problemas gastrointestinales; la hinchazón abdominal, los vómitos, la gastritis; mitiga los dolores musculares, reduce el colesterol malo, y es rica en vitaminas A y C.
Aún se realizan estudios tendentes a demostrar los efectos positivos de la salvia para bajar los niveles glucémicos en pacientes diabéticos y la prevención de complicaciones en los que tienen diabetes tipo 2.
De esa planta “mágica” se hacen jarabes, aceites y extractos, entre otros. Ahí les dejamos algunas recetas para hacerlas en casa y al gusto:
-Infusión para combatir la gripe y otras afecciones virales: poner a hervir una taza de agua y, cuando esté en el punto de ebullición, verter tres o cuatro hojas de salvia y tapar, e inmediatamente apagar el fuego, después de unos minutos, servir en una taza e ingerirla caliente. Puede agregarle otras plantas medicinales, limón y una cucharadita pequeña de azúcar.
-Cataplasma de salvia con vinagre: una taza de hojas frescas y una de vinagre. Colocar las hojas de la planta en una tabla y presionar suavemente durante un minuto con un rodillo, echarla en una olla pequeña y verter vinagre sobre ellas hasta cubrirlas, cocinar a fuego lento por dos o tres minutos, luego sacarlas y ponerlas en un paño limpio, y quedaría lista la cataplasma para colocar en el área afectada -por golpe, herida o inflamación…- lo más caliente posible, durante 30 o 60 minutos, cuidando de no provocar quemaduras.
– Té, si es para el consumo de diabéticos para estabilizar los niveles de glucemia debe tomarse sin azúcar: Poner a hervir un litro de agua y cuando alcance el punto de ebullición echar un gajo mediano de la planta, dejar que hierva 15 minutos aproximadamente, luego tapar el recipiente y apagar.
-Zumo para la gingivitis y otras afecciones de boca y garganta: colocar varias hojas en un paño limpio y machacarlas hasta sacar el zumo en una cuchara grande -puede hacerse mezclado con hojas de orégano-, y tomarse varias veces al día o agregarle agua y hacer gárgara.
Lo cierto es que la medicina natural es una alternativa para paliar el déficit de medicamentos y menos agresiva al organismo, pero al igual que con los fármacos, con la medicina verde hay que tener precauciones y consultar al médico, pues por ejemplo, la salvia no deben consumirla las personas con problemas renales, alergias, epilepsias o mujeres embarazadas o en periodo de lactancia; tampoco aquellas con desequilibrios hormonales, porque dicha planta actúa de forma similar al estrógeno.
Fuente: Diario digital de Guantánamo