La médula espinal está compuesta por numerosas fibras nerviosas que transmiten señales entre el cerebro y el resto del cuerpo. Cuando esta se daña, la conexión entre el cerebro y el cuerpo se rompe, lo que, a menudo, se tradice en pérdida de sensibilidad y función, y en casos graves, parálisis. Su gravedad varía en función del nivel y la extensión del daño. Un informe reciente de la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que aproximadamente 15 millones de personas en todo el mundo viven con lesiones de la médula espinal.
Ahora, investigadores de las Universidades Tecnológica de Chalmers (Suecia) y de Auckland (Nueva Zelanda) han desarrollado un innovador implante bioeléctrico que restaura el movimiento tras lesiones en la médula espinal.»Desarrollamos un implante ultrafino diseñado para colocarse directamente sobre la médula espinal, posicionado con precisión sobre el sitio de la lesión en ratas», explicó el prof.Bruce Harland, investigador principal de la Universidad de Auckland y uno de los autores principales del trabajo, publicado en ‘Nature Communications’.
Tratamiento con campos eléctricos
Dicho trabajo, a modo de prueba de concepto, muestra que el tratamiento con campos eléctricos puede favorecer la recuperación tras una lesión de la médula espinal. «El objetivo es estimular la recuperación para que las personas puedan retomar las funciones perdidas por una lesión de la médula espinal», afirmó, por su parte, el prof. Darren Svirskis, de la Universidad de Auckland.
Los investigadores observaron cómo el tratamiento con campos eléctricos mejoró la recuperación de la locomoción y la sensibilidad en ratas con lesión medular. Los hallazgos ofrecen nuevas esperanzas para las personas que experimentan pérdida de función y sensibilidad debido a lesiones medulares. «A largo plazo, el objetivo es transformar esta tecnología en un dispositivo médico que pueda beneficiar a quienes viven con lesiones de la médula espinal que cambian la vida«, según señaló Maria Asplund, profesora de Bioelectrónica en la Universidad Tecnológica de Chalmers.
En definitiva, este avance ofrece nuevas perspectivas para un tratamiento eficaz ante la pérdida de sensibilidad y función a consecuencia de lesiones medulares. El siguiente paso que pretenden dar estos investigadores es explorar cómo las diferentes dosis, incluida la potencia, la frecuencia y la duración del tratamiento, afectan a la recuperación, todo con el fin de descubrir la receta más eficaz para la reparación de la médula espinal.
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