Son más de 60 años en los que Cuba y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) han desarrollado un sólido programa de cooperación conjunta que abarca múltiples ámbitos. Acerca de las acciones para consolidar y ampliar esos vínculos en el sector de la Salud, dialogamos este lunes con el doctor Garry Conille, director regional de ese organismo, y con la señora María Alejandra Trossero, representante de la UNICEF en nuestro país.
Durante nuestro intercambio recordamos la destacada contribución de la UNICEF al Programa Nacional de Vacunación —desde la década del 60— así como su respaldo a la erradicación de enfermedades prevenibles por vacunas, y el mejoramiento de los indicadores del Programa de Atención Materno Infantil.
Justamente a ese último aspecto están encaminados en la actualidad los principales proyectos de colaboración que llevamos a cabo, con el propósito de mejorar la atención médica y la vida, tanto de la madre como de su hijo.
En tal sentido, comentamos al doctor Conille los esfuerzos que realiza el Gobierno cubano para respaldar los servicios de Salud, severamente afectados no solo por el impacto que significó en nuestro sistema sanitario la COVID-19, sino en gran medida por las consecuencias del injusto bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de los Estados Unidos a nuestro pueblo. Es una realidad que indiscutiblemente ha conllevado a que existan procederes pendientes por la falta de recursos, que impiden resolver todos los problemas de salud en este importante segmento de la población.
De igual manera, compartimos sobre el Plan de Estado del Gobierno cubano para el enfrentamiento al cambio climático, conocido como Tarea Vida; de la reciente aprobación de la Política para la Atención Integral de la niñez, la adolescencia y las juventudes en Cuba; de las potencialidades de la industria biotecnológica y farmacéutica cubana; así como de las capacidades de nuestras universidades de Ciencias Médicas para la formación de recursos en nuestro país, al tiempo que explicamos particularidades del Sistema Nacional de Salud.
Por su parte, el doctor Conille reconoció el funcionamiento de nuestro modelo sanitario y destacó cómo sus principios básicos repercuten de manera positiva en los indicadores de Salud de la población cubana. En sus palabras, ratificó, además, la decisión de continuar apoyando a nuestro país en múltiples espacios.
Tras agradecer, una vez más, el significativo apoyo que recibimos de la UNICEF en el periodo de enfrentamiento a la pandemia, reiteramos nuestra voluntad de seguir trabajando de conjunto a través de vías innovadoras y de avanzar en la cooperación triangular para, con la experiencia cubana en la colaboración internacional, ayudar también a otras naciones en los temas asociados a la protección de la salud de los más pequeños.
Fuente: Ministerio de Salud Pública